¿Por qué no se sigue directamente las enseñanzas del Profeta (PBd)?

Por diversas circunstancias históricas, los primeros musulmanes de la época del Profeta (PBd) sólo se dedicaron a compilar por escrito el texto del Sagrado Corán. A la muerte del Profeta del Islam (PBd), los musulmanes tenían el texto coránico escrito y memorizado. En los años siguientes, mientras el alcance del Islam aumentaba y se expandía, los musulmanes bajo las órdenes de los primeros califas del Islam, se abocaron a la tarea de realizar copias del Corán para que fuesen distribuidas por toda la población musulmana, incluso de las regiones más alejadas del centro cultural que era Medina. Las zonas de Siria, Palestina, Turquía, Egipto y todo el norte de Africa hasta la Península Ibérica, todo el territorio del Imperio Persa, la zona del Iraq actual o del Yemen, al sur de la península árabe, no conocieron directamente al Profeta (PBd) y no recibieron ningún material escrito aparte del Sagrado Corán.

  Todos los musulmanes coinciden en que es necesario complementar el mensaje del Sagrado Corán con las enseñanzas de la sunnat del Profeta (PBd). Pues existen numerosas cuestiones que el Corán sólo menciona en forma muy general o que directamente omite, cuestiones que se encuentran detalladas en la sunnat del Profeta (PBd). Y como la sunnat de Profeta (PBd) no fue transmitida como un texto escrito como el Corán, sino a través de diversos transmisores de entre los compañeros del Profeta (PBd), es claro que no tenemos disponible la sunnat directamente del Profeta (PBd) sino a través de un transmisor.

  En consecuencia, nadie sigue directamente la sunnat del Profeta (PBd) sino que todos lo hacen a partir de lo recibido de parte de un compañero del Profeta que lo haya visto y escuchado directamente.

  Cabe aclarar aquí que tampoco los compañeros del Profeta (PBd) pusieron por escrito el material del conjunto de enseñanzas del Profeta (PBd), que se lo conoce con el nombre de hadiz. Las colecciones escritas de hadiz datan de unos 300 años después del Profeta (PBd), por lo que hubo un largo tiempo en que tales enseñanzas se conocían por transmisión oral.