Corea del Norte, en respuesta a las sanciones “hostiles” impuestas contra este país, informó el martes de que irá más allá de la realización de la prometida tercera prueba nuclear.
Asimismo, el Gobierno norcoreano advirtió de que las autoridades del país asiático habían decidido emprender acciones más firmes debido a las medidas hostiles de EE.UU. y Corea del Sur.
Esto ocurre mientras el embajador surcoreano de Bloque asiático ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (CSONU), Kim Sook, avisó el lunes de que el organismo tomará medidas “firmes y fuertes” contra Corea del Norte, si este país realiza una prueba nuclear de alto nivel.
Además, el portavoz del ministerio chino de Asuntos Exteriores, tras hacer referencia, de una parte, a la preparación del Corea del Norte para llevar a cabo la citada prueba nuclear y, de otra, a la maniobra conjunta de EE.UU. y Corea del Sur, advirtió el lunes de que ponían en riesgo la estabilidad de la península coreana.
Por su parte, el Gobierno de Pyongyang, tras conocer la resolución aprobada en su contra por el CSONU, adujo que el organismo se ha convertido en un títere en las manos de algunos poderes occidentales y ya no se sentará a la mesa para negociar el desarme nuclear de este país, pues tiene derecho a realizar pruebas con fines pacíficos.
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